La leishmaniosis es una enfermedad zoonótica (puede afectar tanto animales como humanos) presente en 98 países del mundo, con un registro de 1,5 a 2 millones de nuevos afectados y por la cual cada año hay más de 30.000 fallecidos. Pero, aunque estos datos suenen alarmantes, nuestra intención es que conozcas de esta enfermedad y algunas formas de cómo evitar la leishmaniosis en perros. ¡Acompáñanos!
¿Qué es la leishmaniosis en perros?
La leishmaniosis es una enfermedad que afecta a la piel, las mucosas y los órganos internos, y es producida por un parasito llamado leishmania, el cual a su vez es transmitido por el mosquito flebótomo. Este mosquito es de hábitos nocturnos y actúa en condiciones climáticas ideales de 18 a 22 ºC, por lo que en esta temporada veraniega su actividad más intensa comienza del atardecer hasta el amanecer.
Probabilidad estadística y lugares con mayor riesgo de contagio en España
Sin protección alguna, un perro tiene una probabilidad de entre 3% y 18% de contraer la enfermedad. Cifras que pueden aumentar si el perro frecuenta pasear por la noche o habita en lugares cálidos/húmedos. Siendo las razas como el pastor alemán y el bóxer las más susceptibles y, en términos generales, los perros menores de 3 años y entre los 8 y 10 años de edad.
Además, en España, las regiones de Aragón, Castilla y León, Cataluña, Madrid, Baleares, Murcia, Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura son las que mayor índice de contagios presentan de esta enfermedad.
Síntomas de la leishmaniosis en perros
Alguna de los síntomas más fáciles de detectar y comunes de la leishmaniosis en perros son:
- Lesiones dérmicas alrededor de ojos u orejas
- Problemas renales o hepáticos
- Heridas que no curan
- Falta de fuerza
- Pérdida de apetito
- Apatía
- Delgadez
- Almohadillas agrietadas
- Cojeo sin motivo
- Sangre en la orina
- Diarrea
- Piel seca
- Caspa
Si tu perro sufre alguno o varios de estos síntomas, no esperes a que empeore y acude de inmediato a tu veterinario de confianza.
¿Qué hacer para prevenir la leishmaniosis en perros?
Un estudio realizado por el veterinario Richard Reithinger concluye que, los productos contra la leishmaniasis canina no son infalibles, pero reducen el riesgo de picadura en un 86%.
Por lo que, la manera más efectiva de combatir la leishmaniosis es la prevención todo el año bajo la combinación de diferentes métodos como, la vacunación, pipetas y collares. Y también otros cuidados adicionales como:
- Si duerme fuera, aplicar periódicamente productos repelentes e insecticidas sobre y dentro de su caseta.
- Si duerme dentro, colocar mallas mosquiteras con orificios inferiores a 2 milímetros (tamaño del flebótomo) en habitaciones y rociarlas con insecticida.
- Evitar paseos a última hora de la tarde o primera de la mañana.
- Realizar revisión veterinaria el término del verano.
Tal y como indican desde el Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid, esta enfermedad en los perros es crónica e incurable, por lo que es recomendable medidas como las anteriormente expuestas.
Así pues, para finalizar y, ante cualquier sospecha, no lo pienses 2 veces y acude al veterinario que es quien puede diagnosticar la leishmania para su posterior tratamiento y control adecuado.
Esperamos, como siempre, haya sido de utilidad este artículo. Y, para completar la información acerca de la Leishmania y las enfermedades de verano te recomendamos echar un ojo a esta siguiente entrada de blog.
