¿Quién no ha visto a un gato tomando el sol? Esta situación es tan común entre todos los que tenemos a un felino como animal de compañía que nos ha llevado a preguntarnos… ¿Por qué a los gatos les gusta el sol? ¿Hasta que punto es bueno que mi gato se pase horas al sol?
Existen muchas teorías y/o mitos que afirman que a los gatos les gusta el sol y eso está claro porque no hay minino al que no le guste tomarlo en algún lugar cálido y confortable, ya sea dentro o fuera de casa.
Sobre el papel, que tu gato tome el sol es bueno. Si los felinos buscan fuentes de calor por todos los rincones de la casa o al aire libre será por algo, y si encima esta acción les reporta algo bueno, mejor que mejor. Por eso, a continuación os vamos a explicar cuáles son los beneficios de tomar el sol para los gatos.
Los gatos son unos felinos domesticados que si fueran salvajes, dormirían y descansarían por el día y cazarían a sus presas durante la noche. Al tenerlos como mascotas, este ritmo de vida ya no les corresponde pero aún así, suelen pasarse la mayoría de horas diurnas reponiendo fuerzas y durmiendo en algún lugar calentito donde, a ser posible, peguen directamente los rayos de sol.
Por todos es sabido que gracias al astro rey, nuestra piel absorbe los rayos de sol y nuestro cuerpo es capaz de sintetizar la vitamina D que necesitamos para que todo el organismo funcione correctamente, y con los gatos pasa lo mismo. Los rayos de sol ayudan a los felinos a obtener la vitamina D que su cuerpo necesita pero no tanto como quisiéramos ya que, pese a lo importante que es, se ha demostrado que el pelo de los gatos bloquea los rayos utravioleta encargados de este proceso y que el aporte de esta vitamina es ínfimo comparado con otro seres vivos. Lo que sí aporta la cantidad necesaria de vitamina D a los gatos es una buena alimentación, por lo que esta debe ser equilibrada y adecuada a su edad.
Si tu gato no disfruta de suficiente luz solar, es probable que tu mascota se vuelva apática, letárgica y abatida, todos los síntomas del trastorno afectivo estacional o TAE. Un día soleado proporciona muchos estímulos para la felicidad y la salud física de tu gato.
Por supuesto, la falta de luz solar también podría originar una falta de energía en tu gato. Recuerda que tu gato depende de los rayos del sol para mantener su vigor y vitalidad.
¿Es bueno que mi gato tome el sol?
Sí, pero moderadamente. A pesar de que se ha demostrado que los gatos pueden vivir sin el Sol, sobre todo cuando son gatos domésticos que viven en pisos de interior en los que no da directamente y no salen nunca la calle, nuestras mascotas serán muchos más felices si pueden disfrutar de una apacible cabezadita en nuestros pies de la cama u en otras zonas cálidas de nuestra casa. Si bien tomar el sol es beneficioso para la mayoría de gatos, a excepción de esas razas que no tienen demasiado pelaje o los gatos blancos, se debe regular su exposición solar. A ser posible, vigilar la estancia en los rayos de sol de nuestro gato y evitar las horas punta, sobre todo en los meses de verano en los que hay un calor extremo. Sin duda, es recomendable que nuestro gato no pase varias horas seguidas tomando el sol.
Aunque a los gatos le guste el sol, es necesario vigilar y procurar que nuestro minino no lo tome en exceso, sobre todo en verano y si es un gato sin pelo o con poco pelaje, porque sino podría sufrir un golpe de calor o una insolación.