Cuando un perro comienza a vivir con una familia, el proceso de adaptación y familiarización es bastante rápido y el cachorro aprende con celeridad qué papel ocupa dentro de ella. Todos sabemos que los perros son animales sociales que pasan toda su vida rodeados de otros perros, animales o personas y cualquier separación les produce un efecto de ansiedad que si no se previene puede ser negativo para todos. Digamos que tu perro te echa de menos cuando no estás, y que lo exterioriza como sabe: ladrando. ¿Cómo enseñar a tu perro a estar solo en casa? ¿Cómo puedo salir de casa sin que ese momento se convierta en un drama?
Para lograr que el perro no viva la separación con ansiedad debes enseñarle en primer lugar que volverás a casa. Parece simple, pero no lo es. Cuando te vas el perro simplemente ve eso, que te vas. Y a veces sufre porque cree que quizá no vuelvas. Cuando a un perro le produce ansiedad la separación comienza a ladrar, gemir, morder, destrozar el mobiliario de la casa, arañar las paredes, etc. Si tu perro ya ha presentado alguno de estos síntomas al quedarse solo, es hora de que nos pongamos manos a la obra y reduzcamos ese nivel de nerviosismo para que no ocurra nada la próxima vez que se quede solo.
Lo primero, dedica el tiempo necesario a tu mascota. Evita la falta de ejercicio de tu perro y saca tiempo de donde puedas para pasear a tu animal a diario. Si vas al trabajo, sácalo y juega con tu perro antes de salir. Consigue que el perro gaste energía, que esté ligeramente cansado. Evita al máximo las despedidas antes de salir de casa. Si quieres que tu perro no asimile tu marcha a un drama deja de hacerle saber mediante distintos gestos de cariño que te vas. Cuando vuelvas tampoco hace falta que saludes al perro como demostrándole que ya has llegado. Esa es la fórmula para desvincular el trauma que les produce la separación y conseguir enseñar a tu perro a estar solo en casa, y es que el animal tiene que entender tu partida y llegada como algo casual y habitual y no como un problema o una inmensa alegría.
Los perros son animales de costumbres y rutinarios. No alteres su rutina si no quieres que tu perro sufra ansiedad. Acostúmbrate a sacarlo a las mismas horas y hacer cumplir las mismas expectativas cada día, de este modo le ayudas a desarrollar sus hábitos y a que se acostumbre a asimilar qué horas toca estar solo en casa. Otro truco muy interesante es dejarle cuando te vayas una radio encendida para que el ruido le sea familiar y no le de miedo del silencio. Esto ayudará a reducir su ansiedad.
Pese a lo que mucha gente cree, tener otro perro para que le haga compañía al primero no es una buena solución. El perro no quiere quedarse solo sin ti, le da igual que hayan otros animales con él. Si quieres ahorrarte problemas de territorialidad y convivencia, no adoptes esa solución para enseñar a tu perro a quedarse solo en casa, más bien aplica las medidas que hemos comentado en este artículo y hazle saber al animal que no hay motivo para sufrir, pues siempre volverás.
